Los Compadres

La foto es del grupo Los Compadres que estuvieron presentes en la exposición fotográfica Crónicas de Boconó, Cuentos, Retratos y Miradas, y ese mismo día se presentó el libro “Los tres Clavo” del escritor boconés Domingo Miliani. Esto se realizó en el Museo Trapiche de Los Clavo el 17 de mayo del año 2013, ahí pudimos capturar la esencia de los músicos tradicionales de esta región andina, llena de folklore, alegría y pasión. En la imagen, se puede apreciar a los cuatro miembros de la agrupación musical de ese entonces.  

La música andina es parte fundamental de la identidad cultural de la región y es un patrimonio que se ha transmitido de generación en generación. La presentación de Los Compadres en este evento es un claro ejemplo del valor y la importancia que se le da a la música tradicional en la ciudad, y cómo esta se mantiene vigente a lo largo del tiempo. Los Compadres estuvieron presentes en estos dos actos especiales, que fueron un preámbulo de la celebración de los 450 años donde germinó o marcó el inicio del asentamiento de Boconó, esa fecha fue un 30 de mayo de 1563.

En el Mercado Municipal

Esta toma es del Mercado Municipal de Boconó es del año 2014 y nos muestra la vida cotidiana de un gran pueblo en la cual el mercado funciona como un lugar de encuentro para muchas personas. A diferencia del mercado Campesino Tiscachic, este es un mercado totalmente techado y organizado, donde se pueden encontrar una gran variedad de productos frescos, carnes, pescados, así como desayunos y otros alimentos típicos de la región.   

El mercado municipal es un lugar popular en la zona, ya que ofrece a los habitantes de Boconó y de los alrededores, la oportunidad de hacer sus compras de manera rápida y eficiente, así como de socializar con amigos y vecinos. En la foto, se puede ver claramente el aviso de la carnicería "El Rey del Bisté", un negocio local que seguramente ha sido parte de la vida de muchas personas en la ciudad.   

En resumen, la imagen del mercado municipal de Boconó nos muestra la importancia que estos lugares tienen en la vida diaria de la ciudad y cómo son espacios que nos permiten conectarnos con nuestra cultura, nuestra comida y nuestra gente.  

En el Mercado Campesino

La imagen del hombre con su sombrero seleccionando sus papas en el mercado campesino de Boconó, es una muestra de la fortaleza y la resiliencia del pueblo boconés ante la adversidad. Recuerdo que antes del año 2017, en medio de una crisis, el Mercado Campesino de Boconó era una válvula de escape para muchas personas que luchaban por encontrar alimentos básicos y a precios accesibles.   

En este mercado, negociaban los mediadores y además los propios agricultores podían llevar sus cosechas y venderlas directamente a los consumidores, lo que no sólo les permitía obtener ingresos por su trabajo, sino que también ofrecía una variedad de productos a la población.  

En síntesis, esta imagen nos recuerda el valor la organización comunitaria durante momentos difíciles, y cómo esto puede marcar una gran diferencia para enfrentar una crisis. 

En el cafetín

Esta fotografía que tenía guardada en un disco duro la hice en marzo del año 2006 y básicamente representa un instante de la esencia de Boconó. La foto fue hecha con una cámara de baja gama, pero se logra apreciar a un hombre sencillo del campo con su típico sombrero, quien se encuentra observando el mostrador del cafetín del hospital de la zona. Sin duda, esta imagen nos lleva a un ambiente cálido y auténtico.  

La humildad del hombre de la fotografía y su vestimenta típica de la región, muestra una faceta de la cultura de la ciudad, donde las raíces se mantienen vivas y presentes en la vida diaria de sus habitantes. Además, la tranquilidad y serenidad con la que este hombre se encuentra mirando el mostrador, nos transporta a una atmósfera de paz y armonía.  

El hecho de que la fotografía haya sido tomada en el cafetín del hospital de la zona, es significativo ya que resalta la importancia del trato humano cercano y amable que caracteriza a la gente de Boconó. Es este trato amigable lo que hace que la ciudad sea un lugar acogedor y lleno de vida, donde los visitantes son recibidos con los brazos abiertos. 

En definitiva, este recuerdo fotográfico es una representación visual de la esencia de la vida en Boconó, un lugar donde el trato humano y la cultura local son elementos fundamentales en la cotidianidad de sus habitantes.

El corral del mercado

Este corral está diseñado en forma circular para encerrar a los animales. Allí, los vendedores exhiben sus animales y los compradores examinan su estado físico y luego ofrecen.  

Aquí se da un proceso de comercio, y es muy peculiar ya que ambas partes, vendedores y compradores son muy tercos y no quieren ceder fácilmente. Además, la forma de hablar y de mirarse durante el proceso de negociación es muy ocurrente, lo que le da un toque divertido y único a la experiencia. La terquedad y el ingenio de ambas partes hacen de esta experiencia algo muy peculiar y memorable.  

La imagen captura un momento en el Mercado Campesino de Boconó, un pueblo andino ubicado en el estado de Trujillo, Venezuela.  

Foto del 15 de junio 2013.

Ordeñando

Ordeño en el corral del Mercado Campesino Tiscachic. Aunque los animales no son tan grandes, sus dueños los cuidan lo mejor posible para poder resolver con la producción.   

Foto de octubre de 2.016. 

"Caimanera"

Cancha de Béisbol Argimiro Gabaldón de las rurales de la Loma del Pabellón. 

El béisbol es catalogado como el deporte nacional en Venezuela.  

Foto: 25 de diciembre del 2.013. 

Caimanera en Venezuela significa: "Encuentro deportivo es totalmente improvisado, sin arbitraje, y sin ningún tipo de formalidades. Se realiza entre amigos y vecinos, en los colegios, patios deportivos, los patios de la casa o en la calle."

Niña en el Tiscachic

Niña en el Patio de Piedras del Mercado Tiscachic.  

4 de mayo del 2.013.

Ir al Mercado Campesino Tiscachic

En el Patio de Piedras del Centro de Servicios Campesinos Tiscachic

Era 15 de junio de 2013, como todos los sábados ir al Mercado Campesino Tiscachic era parte de mi rutina, no solo para hacer las compras, sino también para hacer algunas fotos. Hay infinidad de situaciones propia de un mercado popular en donde las tomas se hacen interesantes.

De las situaciones que más disfrutaba era ver como hacían negocios, siempre buscando la parte más ventajosa para quien compraba o vendía.  

Jugando basquetbol

Par de “chinitos” jugando basquetbol en la posada Descanso del Campo en el sector El Boquerón. (Septiembre 2017).

Hoy cuando lo digital o virtual nos consume el tiempo no podemos dejar de olvidar cuando sudábamos en la cancha y de pequeños todo giraba en torno a una pelota, un palo, una "cachiporra", una chapa, un balón espichado, gritos y sonrisas...

El Juez de Niquitao

Foto del 20 de enero de 2013 en Niquitao

Este pueblo hermoso y tranquilo lo disfruté tantas veces, visitarlo siempre era emocionante, la vista a las montañas desde el centro, la casa que quise comprar en la calle La Asomada, el clima óptimo y la gente tan amable, de hecho este lugareño montado sobre el caballo fue muy gentil, me quedó su trato tan diferente a lo que uno suele ver.

Gracias a una publicación que hice en Instagram pude saber su nombre, de hecho mi compañero en NotiBoconó, el periodista y Profesor Alirio Altuve me dijo lo siguiente:

“Lo conocí, el niño es su nieto, el fue juez en Niquitao, le di clases a sus tres hijos. Murió trágicamente, un día llegó al pueblo con su caballo, habían fiestas en Niquitao, se bajó del caballo, compartió con unos amigos, luego de un rato decide continuar su rumbo, al momento de montarse en el caballo, cuando tenía el pie en el estribo, sonó una bomba de esas de fiestas, la bestia se asustó y salió corriendo, el jinete quedó a merced del caballo que lo arrastró varias cuadras, recibiendo golpes en la cabeza y el rostro, eso le causó graves heridas y luego la muerte...

Se llamaba Gilberto Sánchez, fue juez en Niquitao, cuando existían los jueces de municipio, cuando existían los distritos, después pasaron a jueces de parroquia y eso lo eliminaron y él se jubiló. Tenia tierras y trabajaba la agricultura”

El transeúnte

Transeúnte desconocido por mi (me ha dicho que se llama Edgar), pero estaba atento para hacer la foto en una toma, buscaba que entrara en la regla de los tercios y pude hacerlo. Además, la fotografía en las calles de mi pueblo me atrae mucho por la características de las personas y el contexto, de hecho se puede apreciar los muro de los que fue la casa de la familia Clavo, ahora llamada Museo Trapiche de los Clavo. 

De hecho la señora y su hija que vienen atrás le da este toque urbano. Un seguidor de @unavistabocono en Facebook me ha dicho que esta señora es la vende frutas frente al hospital Rafael Rangel de Boconó.

Esta foto la hice el 19 de agosto de 2016, en las cercanía del Museo Trapiche de Los Clavo, esta sería la ubicación en → google mapas.

Caminar y conversar

Pareja de novios caminan por los los alrededores de la Laguna de Los Cedros

Si bien es cierto que el centro de atracción de este lugar es su laguna, también podemos decir que dar un paseo por sus alrededores es otro gusto que nos ofrece la naturaleza en este privilegiado lugar de Boconó. 

Caminar y conversar en alrededores como este hace que se transforme la vida y te de la oportunidad de salir de lo monótono y de la cotidianidad. Hasta pudiera ser el comienzo de una bella relación...

Tres cosas por hacer en este blog

Foto hecha por Javier Briceño en anta Rosalía, en las cercanías del Río Boconó, cerca de San Rafael

Hola queridos seguidores del blog, ha pasado tiempo sin publicar las hermosas fotos del pueblo que tanto amo y que hoy día se ve sumido en una gran crisis sin precedente. 

Me he propuesto para los próximos días hacer algo con el blog, por ejemplo: 

• Contar como fue lo del robo de mis herramientas de trabajo fotográfico a mano armada, con los detalles. 
• Mostrar material inédito que no he publicado. 
• Buscaré viejas publicaciones para escribir detalles que son importante añadir y posiblemente haré algunas sustituciones de las fotos. 

Por ahora he pensado en estas tres cosas, pero me tomaré el tiempo necesario. Lo que estoy haciendo ahora mismo es respaldar unas 4500 fotos de Boconó que tenía almacenadas en un lugar que no esperaba conseguirlas, un disco duro viejo de un ordenador que estaba abandonado, esto fue un "respiro" ya que cuando me asaltaron se llevaron mi laptop y otras cosas que luego daré los detalles. Antes no podía contarlo para evitar peligro de represarías.  

A pesar de la crisis aun hay muchas cosas interesantes que se pueden rescatar del Jardín de Venezuela, me refiero a su gente, la cultura y su belleza natural. 

Javier Briceño: "Boconó es un sitio estupendo para fotografiar sus paisajes"

He disfrutado mucho de tener como compañero a Javier A. Briceño Hernández un trujillano de los que aman el terruño y la naturaleza, se le nota que le gusta la fotografía, la explora, la ensaya y la practica a diario, por eso quiero compartir un poco de él en esta pequeña entrevista: 

¿Cómo surgió tu afición a la fotografía? 

Siempre fui el fotógrafo de la familia cuando nos reuníamos. Solían decirme que mis fotos lucían muy bien y eso me motivaba mucho. A pesar de que tomaba las fotos solo porque me apasionaba hacerlo. A medida que pasaba el tiempo y pude adquirir un nuevo teléfono, pude percibir que las fotos se veían mucho mejor e hizo que disfrutara aún más la fotografía. 

Cuando comencé a trabajar en el Museo Trapiche de los Clavos se me presentaron muchas más oportunidades para experimentar con la fotografía. Un momento muy importante para mí, fue la primera exposición, la cual era de fotografía. Allí conocí al fotógrafo de esa exposición y pude conversar con él e intercambiar opiniones, noté que estaba muy comprometido con su trabajo. Y eso, entre otras cosas contribuyó a aumentar mi afición por la fotografía. 

¿Qué te transmite la fotografía a nivel personal? 

Me gusta pensar que cuando las personas puedan observar mis fotos, puedan imaginar lo que pensé o lo que sentí cuando decidí tomarla. Esa sensación de poder congelar ese momento, ese instante, que es único, poder retratarlo… es una experiencia increíble. El poder sentir que ahora es más que un pasatiempo, es una pasión. Eso me mantiene motivado. 

¿Tomar fotos de la naturaleza te hace más sensible? 

Seguro que sí. A menudo las personas están demasiado ocupadas y dedican poco tiempo a apreciar esas pequeñas cosas como un atardecer, una flor, una mariposa… Se ha convertido en algo tan común que tienden a ignorarlo. Todos los días trato de encontrar oportunidades para tomar más fotos. Suelo pensar: “¡Esta sería una buena foto!” sea que la tome o no. 

He notado que tienes muchas fotos del Museo Trapiche de los Clavo ¿Crees que es un sitio ideal para tomar fotos? ¿Por qué?

Sí, es un sitio agradable. En mi opinión, pienso que reúne las cualidades necesarias para tomar muchas fotos; la naturaleza, su peculiar arquitectura, ¡Todo merece ser retratado! Aunque para mí y creo que para cualquier fotógrafo no existe límite a la hora de tomarlas, de cualquier lugar o cosa puede salir una buena foto. 

Además del museo, ¿cómo describes fotográficamente a Boconó?  

Boconó es un sitio estupendo para fotografiar sus paisajes, su clima, su gente, sus edificaciones. Hay muy buenos fotógrafos aquí, los respeto mucho. Y se de otros que se han atrevido a viajar y darse a conocer. 

¿Dónde se puede apreciar tus capturas?  

De momento solo cuento con mi Instagram personal www.instagram.com/jabriher  donde he subido mis capturas desde casi el inicio de esta pasión.

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"Fotografiar es colocar la cabeza, el ojo y el corazón en un mismo eje." HC- Bresson

De vuelta a la Escuela

Madre y sus pequeñas

Rumbo a la Escuela Elvira Parilli de Senior "Fe y Alegría" de Boconó

La Siembra a Mano

Agricultor esparce las semillas en un terreno en la Urb. La Coromoto de Los Pantanos

Con la "esperanza en su mano"

Finalmente Dios hará crecer la semilla

No se puede recoger la cosecha, antes de la siembra (Anónimo)

La opción del Mercado Campesino

De compras, en el Patio de Piedras en el Mercado Campesino TISCACHIC

El Mercado Campesino Tiscachic sigue siendo una opción para la compra de hortalizas, pescados, carne, cestería, artesanía y recientemente otra cantidad de productos que se anexan por la cantidad de personas que buscan trabajar todos los sábados para conseguir ingresos extras ante la difícil situación económica. 

Ya para estos años 2016/2017 se puede conseguir a algunos vendedores con puntos de ventas inalámbricos, sobre todo los que venden productos del mar. También hay vendedores que traen productos desde la zona baja del estado Trujillo y pernoctan en la Av. Parque Las Ferias. 

¿Cómo comenzó?

Bajo la visión de hermandad, el 2 de agosto de 1975 comenzó la construcción de un Centro de Servicio Campesino, en terrenos que fueron donados por Don Francisco Gonzalo Gabaldón. Cuatro años más tarde, en 1979, se finaliza la construcción y se conforma en Boconó, El Centro de Servicio Campesino Tiscachic. (Fuente y + Info: Saber ULA)

Obrero sobre la Iglesia San Alejo

 Es su hora de descanso. 23/12/16

Francisco Briceño pintado un arreo de mulas

Concentrado en su oleo en el Museo Trapiche de los Clavo

 Con cada pincelada da forma a lo que Leonardo Da Vinci llamó "La pintura es poesía muda..." 

La paleta y su diversidad de colores, lista para crear

Este artista boconés tiene como proyectos hacer una exposición de cuadros donde su temática será Boconó. Además, anhela formar una escuela de pintura en honor al artista plástico Félix Perdomo con quien se inició en dibujo y pintura en el año 1977 en el Ateneo de Boconó. 

Actualmente da clases de pintura en el Museo Trapiche de los Clavo. 

Su celular para contactarlo es 0426-249.2383